Confíe en Brink’s para gestionar de manera segura las partes del proceso administrativo que más tiempo y costos consumen.
El servicio de gestión de bóveda de efectivo de Brink’s se encarga de la seguridad, la previsión y el procesamiento de su efectivo, lo que incluye el almacenamiento, la gestión de inventario, el recuento, la validación y la selección de billetes aptos para la circulación y la detección de billetes falsos.
Las instalaciones seguras de Brink’s están vigiladas las 24 horas, los 7 días de la semana, y nuestro personal altamente capacitado supervisa en forma continua sus necesidades de atesoramiento de efectivo y monedas, y de gestión de inventario.
Realizamos previsiones de sus saldos de efectivo y brindamos transporte bidireccional a la Reserva Federal, a fin de maximizar la eficiencia de sus necesidades de efectivo diarias.
Nuestras bóvedas de efectivo brindan solicitudes de cambio, procesamiento de depósitos, manejo de excepciones, selección de billetes aptos para la circulación y detección de billetes falsos.
Dado que el efectivo sigue siendo un método de pago preferido por consumidores de todas las edades, la tecnología para el manejo de efectivo está en constante evolución hacia el futuro. Como resultado, tanto las tiendas minoristas como los bancos están siempre en busca de nuevos servicios y dispositivos para satisfacer las necesidades de sus clientes de manera más eficiente.
A pesar de la creciente popularidad de los pagos por dispositivo móvil, el efectivo sigue siendo muy utilizado por los consumidores de todo el país. Con esto, muchas personas siguen utilizando efectivo para pagar las tarifas gubernamentales, como impuestos, multas de aparcamiento, cargos judiciales y más. Este uso de efectivo crea una necesidad de gestionar efectivamente el ingreso de efectivo para permitir operaciones eficientes diariamente en los organismos gubernamentales.
Ya sea que trabaje para el gobierno local o federal, muy probablemente su organización acepte efectivo como forma de pago. Desde cobrar impuestos y tarifas de multas de aparcamiento hasta facturas de servicios públicos y más, las dependencias gubernamentales reciben una sorprendente cantidad de efectivo por año.
